12.4.14

el filósofo, el ego, la compasión

I El filósofo

Érase un hombre sabio que dedicó gran parte de su vida a estudiar la tradición filosófica, a transcribirla, a explicarla. Una vez que cedió a los embrujos de los grandes pensadores se dedicó a buscar la filosofía en su propia tierra. Viajó por los rincones de las filosofías prehispánicas, por las filosofías antiguas, por las filosofías silenciadas por Occidente. Una vez que sació sus ojos con las enseñanzas de los otros sabios escribió sus postulados. Se hizo famoso, se hizo maestro de muchos, se hizo sabio, pero pecó de ingenuo. Pensó que con el conocimiento abstracto se puede abrazar a la humanidad, Se equivocó. Al final de sus días decidió abrazar la humanidad trabajando para ella. Se deprimió. Ninguna de sus teorías  explica la dinámica de quienes están atrás del poder. El hombre sabio cuestionó sistemas, estructuras, formas de pensamiento, pero se le olvidó cuestionar al ser humano que las pone en práctica. Lo dejaron solo y en la soledad se dio cuenta que estaba equivocado.

II El ego

Quienes están detrás (y atrás) del poder esperan pacientes a tener una oportunidad. Una vez instalados son insaciables, crueles, cínicos. El fin justifica los medios, dirían algunos, aunque el costo sea demasiado alto. Un costo que evidentemente ellos no asumen pero afecta en lo más sensible a quienes de lo lejos o de cerca lo perciben. El ego es el gran traidor de la sabiduría. Ego en masculino, sabiduría en femenino. Ego de Occidente, sabiduría de la madre tierra. El ego nos hace levantarnos un día por un aplauso, por un reconocimiento, por un deseo, pero también nos tira por años en la más profunda vacuidad. El ego es un espejismo en el desierto de la trastocada mezquindad humana.

III La compasión

La cicuta del hombre sabio fue el ego de sus estudiantes. Como Sócrates prefirió el juicio en lengua extranjera, prefirió el silencio y el aislamiento. El hombre sabio muere de tristeza por la traición de quienes no pudieron controlar su ego y asume con compasión su inmadurez espiritual. El costo no será para él sino para quienes se quedan con la idea de triunfo (o fracaso). El hombre sabio es sabio porque puede tomar distancia del ego de sus ahora detractores, pero le aflige no tener tiempo para reescribir sus postulados, para poner en el centro de la discusión al ser humano y no a los sistemas ni a las estructuras. Sabe que se equivocó en sus hipótesis que se hicieron tesis, pero también sabe que a días de su despedida la compasión es para con él mismo, quizá habrá tiempo de escribir algo más antes del gran final. Una idea, una hipótesis, una tesis que evidencie la debilidad humana, debilidad con la que a diario convivimos.

15.3.14

Anónima

Dicen que soy impulsiva,
Yo digo que soy voluntariosa,
De voluntad y libertad,
No de necedad.

Un impulso me trajo acá,
Lejos de todo
Cerca de muchos
Anónima.

Un impulso me hizo vivir en Barcelona.
Un impulso me ha llevado a enamorarme
Una y otra vez.
Un impulso me ha hecho amar, desear, querer.
Un impulso ahora me hace estar sola.
Anónima.

Un impulso me hace escribir
Día tras día
Una oración o un intento de poema
Nunca un cuento
Siempre un ensayo.
Anónimo.

Un impulso me hace sentir libre
Volar-Navegar
(Me gustan los dos estados)
Sin perder de vista la tierra
Anónima

Un impulso hoy me hace perder-me
Despertar en la nada
Huir en la muchedumbre
Pertenecer anónima.


8.3.14

Lucidez, seguridad y honestidad

Hablar de la muerte no es cosa fácil,
Menos cuando se habla o se piensa de la muerte de los padres. Sin embargo, cuando se tiene tan claro el camino, incluso hablar de la muerte parece superficial. Ayer le pregunté a mi padre: te quieres morir? Un silencio, una duda,  una respuesta honesta: "No, todavía no cumplo mi objetivo. Aunque prefiero no sufrir". Una respuesta contundente y sin temor a aceptar lo descifrable: "en algún momento todos nos morimos". Mi padre tiene dos objetivos, no se si los cumpla en esta vida. Lucidez, seguridad y honestidad, eso me inculcaste, eso retribuyo, eso pido también al pensar en mi propia muerte.

21.2.14

RRO/gallina/blog/10/2014

A los parlantes de lengua materna,

Recién vi que hoy se festeja el día de la lengua materna. Una gran aberración sin duda en países como el nuestro donde nos hemos dado a la tarea de extinguir la gran diversidad de lenguas maternas ancestrales.... Para acompañar este día (sic) les recomiendo un libro de lo más interesante de Jacques Derrida: el Monolingüismo del otro o la prótesis de origen... Derrida dice algo como por qué en la escuela primaria no nos enseñaban berebere o alguna lengua materna pero sí era opcional el latín, el inglés, el francés era obligatorio... Algo así nos pasó a nosotros y no hemos podido resarcirlo... Ni siquiera cuestionarlo, las lenguas maternas de nuestro país todavía se viven como folclor... Una pérdida terrible de la cosmovisión ancestral...

Anej
Padiuxhi
ka’a xi’itech
Skgalhén
ndene’e, nandi
ariosibá
Maxko
Magö
Adiós


LGP

Véase: http://www.animalpolitico.com/2014/02/dia-de-la-lengua-materna-aprende-saludar-en-4-lenguas-indigenas/



20.2.14

RRO/gallina/blog/09/2014

A quien corresponda,

Que oficio tan poco gratificante ser promotor de medicinas. En la comida corrida de Guanajuato se juntan varios que van o vienen de los consultorios que se enciendan unos metros antes. Traje gris, maleta rectangular de pasta dura tipo piel que arrastran por la banqueta irregular. Concertar una cita, esperar a que el paciente impuntual salga o programarla para otro día por el "doctor está operando". Un oficio o gesto sin duda este de ir de consultorio en consultorio mostrando medicinas "de vanguardia" cada vez más caras y menos experimentales.

RRO