16.8.15

Las relaciones de pareja están sobrevaloradas

Pensé que nunca lo iba a sentir, pero después de más de diez años de estar en parejas varias y con amantes intermedios, afirmo que las relaciones de pareja están sobrevaluadas. Llevo ocho meses con blinkers, de esos que le ponen a los caballos de carga; es decir, de mi casa al trabajo, del trabajo a mi casa. Ya pasó la época de la abstinencia donde al estar cerca de una pareja haciéndose arrumacos todavía se me salían las lágrimas. También ya pasó la época de la negación: "no te necesito para nada, yo puedo sola y si no estoy con alguien es porque no he conocido al amor de mi vida" blablabla. Una encuentra muchas formas para negar el gran dolor de una ruptura pero también para no asumir la condición de estar sola. Llegada al punto donde nadie está en casa cuando llegas, no tienes a quien decirle que la extrañas, ni recibes mensajes de whats app en un fin de semana completo, pues está la resignación y netflix. Horas viendo series y películas de amor en casa. Algunas veces cerveza en mano y pañuelos por aquello de la nostalgia. Pero no dura mucho. De un día para otro me di cuenta que estar sola es placentero. Que la necedad de estar en pareja es la obsesión que las redes sociales y los medios de comunicación reproducen muy seguido. Todos te dicen como estar en pareja, nadie te dice como estar sola. Y si alguno toca el tema es porque estar sola es sinónimo de ser superdotada, o retrasada social. Desayunar sola, comer sola, cenar sola, dormir sola y despertar sola es también una forma de vida, quizá más común de lo que la gente promedio está dispuesta a aceptar.
Tengo una tía que decidió estar sola. Nunca se casó. Solo tuvo un "amor de su vida". Ella era la amante. Él estaba casado. E insistía en llamarlo "nuestro tío". Un día se enteró que había muerto y decidió seguir con su vida sola. 
A lo que voy: estar en pareja es una decisión de vida y conozco casos exitosos. Mis padres. Estar sola es también una decisión de vida y de igual forma conozco casos exitosos: mi tía. A mí me va mejor la primera opción, estar en pareja, pero no hay prisa e incluso estoy dispuesta a que se ma vaya la vida en ello. 
Estar sola y estar en pareja es la combinación perfecta, es como beberse un gintonic con mucha sed: te amarga y te calma. Así también es amar.

La aversión de los pelos

Mientras me bañaba hacia el ritual de la rasurada. No mucho que quitar, soy lampiña, herencia indígena. Y pensaba en la barba del conferencista del viernes, una barba muy larga y abundante que contrastaba con una cabeza pelona. No pude evitar hacer la comparación con mi bello púbico. Pasé el rastrillo por las piernas, las axilas y la línea del bikini... Así dice el canon occidental... Que no se te asome ningún pelo, de otra forma eres hippie y ya no está de moda... Lo que sí está de moda es la depilación completa del pubis. No lo entiendo todavía, me es más cercano a la pedofilia. Lo curioso es que esta moda no conoce de clases sociales ni de oficios. Dicen que es más placentero el sexo, dicen que excita más a la pareja, dicen que es más cómodo... Será el sereno, mi postura es el justo medio. Sin tapujos y sin exhibicionismos. Por algo somos seres peludos. Esa necedad de contravenir nuestra esencia es producto del aburrimiento.

30.7.15

La fuerza guerrera / la fuerza de la sangre

Amanecí guerrera indígena
Quizá por la sangre
La de mis abuelas
Quizá por la que recorre mi cuerpo

Dolor del espíritu 
Sanación en el cuerpo
Días de letargo
Despertar amoroso
Ovulación 

Un cuerpo distinto
Una dicha eterna
La búsqueda ansiada 
Del camino esperado
Ha terminado

Cólico 
Dolor menstrual
Un ciclo se cierra
Cada 7
Cada 13
Cada 28
Da igual

La filosofía ancestral
Se revela 
Despierta
Y cimbra mi pensamiento

Hacer filosofía
Desde lo femenino
Desde lo corporal
Desde la muerte

La sangre guerrera
No necesariamente es roja
También es indígena.

28.7.15

The dead of friends

That's a meditation
A Buddhist meditation
Yesterday I heard it
In my heart 
In my head
Collapse
Maybe is an euphemism
Maybe it took place
The death is always there
We can see it
We can feel it
But we can never accept it.

(For those that passed away, rest in pace and look for us, we will always remember you... until die: Dharma or Samsara?).

25.7.15

Machihembrado

Hablando de los cuerpos de quienes cada tercer día nos encontramos en bañador para hacer nuestro entrenamiento matutino, sorprende que tanto hombres como mujeres estemos tan atentos de nuestra corporalidad, ya sea por lo voluptuoso, lo estético o lo antojable. Categorías en las que agrupo las modalidades que permean el imaginario colectivo. Lo curioso es que existe un sesgo de lo que se puede o no hacer con ello. Un sentimiento, que no en todos es deseo, de otra forma ya se hubiera desintegrado el equipo, y una manera de relacionarnos socialmente distinta.
Recuerdo que cuando inicié en ese equipo, hace casi ocho años, mi temor era que mis compañeras supieran de mis preferencias sexuales y que se distanciaran de mí por temor a que les "fuera a agarrar cariño". Obviamente eso nunca pasó. Es decir, la sexualidad no necesariamente está presente en toda relación del cuerpo. Ahora nos tenemos mucho cariño y en ningún momento me he sentido excluida, incluso antes de ello, ya me había marginado. 
Ayer, mientras comía con algunos de ellos, repasando nombres de quienes admirábamos, no solo por su capacidad de deslizarse en el agua, sino también por el cuidado de su cuerpo, les comentaba mis gustos y favoritos. Es verdad que solo hablaba de hombres porque el cuerpo del nadador me gusta mucho. Incluso más que el cuerpo de la mujer en bañador. Una pieza que no necesariamente es muy estética. Con sorpresa uno de mis amigos me preguntó porqué opinaba si a mi no me gustan los hombres. A lo que contesté, no me gustan para una relación pero eso no significa que no pueda opinar si son "cogibles" o no. Entendió pero le costó trabajo hacer la superposición de ideas. Es decir, en un primer momento supongo que él como a varios les costó trabajo entender que me gustaran las mujeres, como ahora les cuesta trabajo entender que me gusten también los hombres porque casi siempre se piensa en lo machihembrado. Aquello que embona, literal, pero no necesariamente figurado. Desconocía, hasta ayer, el concepto machihembrado y su uso. Seguramente mis amigas feministas estarán en contra de la siguiente afirmación, pero creo que el concepto "machihembrado" es una perfecta acepción de lo que intentamos hacer con nuestros cuerpos socialmente: embonar, pertenecer, ser aceptados, sin importar nuestros gustos ni preferencias.