Salgo de un letargo
Desasosiego
Desesperanza
Escepticismo
Una gran resaca
Una apuesta
a la frustración
Meses de lidiar
con la bandera
de la ideología
de los ideales
ajenos
Batalla perdida
Angustia
Ansiedad
Impotencia
Hoy regreso a mi centro
La batalla impostada
no dio de sí
en mi fuero interno
Hoy recupero mis ideales
Tiempo libre
Calidad de vida
No explotar
No ser explotada
La ideología nunca ha sido mía
19.2.13
10.2.13
Do you believe in love?
Me preguntaste hace días
Do you believe in love?
Reaccioné lentamente
y dije que sí.
Ahora no lo sé.
Quisiera mentir, mentirte.
Por qué me preguntas
si creo en el amor?
La respuesta ya la conoces.
Siempre la supiste.
Quizá nos equivocamos
en tratar de definir nuestra postura:
Decías que eres ontológica
y yo estética.
Do you believe in love?
Quisiera creer.
Vivo para ello,
aunque no sé lo que signifiqué.
Y tú?
Do you believe in love?
Sí, pero no siempre es suficiente
con creer para poder estar.
Do you believe in love?
Reaccioné lentamente
y dije que sí.
Ahora no lo sé.
Quisiera mentir, mentirte.
Por qué me preguntas
si creo en el amor?
La respuesta ya la conoces.
Siempre la supiste.
Quizá nos equivocamos
en tratar de definir nuestra postura:
Decías que eres ontológica
y yo estética.
Do you believe in love?
Quisiera creer.
Vivo para ello,
aunque no sé lo que signifiqué.
Y tú?
Do you believe in love?
Sí, pero no siempre es suficiente
con creer para poder estar.
Excentricidades
He descubierto un gusto insospechado por los velorios.
La primera vez que lo comenté lo dije para salir del apuro.
Ahora lo digo con consciencia:
Me gustan los velorios,
si están concurridos mejor.
La muerte también se debe celebrar,
es la única que nos toma por sorpresa.
La muerte también debería ser una fiesta,
sobre todo si viviste plenamente.
Hace unos días un tío murió,
en su funeral tocaron mambo.
El baile de mis recuerdos,
la fiesta familiar de mi infancia.
La primera vez que lo comenté lo dije para salir del apuro.
Ahora lo digo con consciencia:
Me gustan los velorios,
si están concurridos mejor.
La muerte también se debe celebrar,
es la única que nos toma por sorpresa.
La muerte también debería ser una fiesta,
sobre todo si viviste plenamente.
Hace unos días un tío murió,
en su funeral tocaron mambo.
El baile de mis recuerdos,
la fiesta familiar de mi infancia.
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