23.7.14

#Gaza

He escrito cantidad de tuiters referentes a #Gaza pero todavía no entiendo por qué es necesaria tanta violencia y destrucción en el mundo...
He llenado mi vista de imágenes de niños muertos en #Gaza y todavía no entiendo por qué no hemos podido detener esta masacre...
He seguido en las redes sociales a cantidad de palestinos e israelíes para entender lo que pasa en #Gaza pero ellos tampoco lo entienden. Ambición de muchos.
He tratado de hacer una analogía para entender lo que pasa en #Gaza pero en nuestra sociedad la destrucción se ha vuelto espectáculo.
Quisiera entender lo que nos sucede como humanidad y sólo encuentro indiferencia hacia el otro/otra.
Las redes sociales están plagadas de epitafios de los muertos de #Gaza pero eso no me permite entender por qué nos seguimos matando entre nosotros.

11.7.14

Vivir a prisa?

Estoy por cumplir cuarenta y en repetidas ocasiones me pregunto si no he vivido a prisa. Hace diez años tuve un accidente, unos días antes de cumplir años. Me rompí la nariz y otros huesos de la cara. De lo que me acuerdo gratamente es de la morfina. no sólo es un paliativo para el dolor, también es un psicotropico. Como dicen, vi la luz del túnel en la plancha. El primer pensamiento, o pregunta, fue si me podía morir en paz. En tres minutos hice un recuento de mi vida con el aura de la luz emblemática de lo que debe ser la paz interior (inducida por la droga). Diez años después me he preguntado cantidad de veces lo mismo y la respuesta sigue siendo igual. Sólo que ahora pienso que quizá he vivido de prisa. Estoy por cumplir cuarenta y mi anhelo es empezar a disfrutar cada momento. Un lujo en este mundo y en esta ciudad.

Empecé esta nueva empresa recolectando afiches del año de mi nacimiento: 1974.


10.7.14

Sobre el mundial 2014

Se acaba el mundial y cada vez me gusta menos. Ayer me quedé dormida durante ese horrible partido donde ninguna de las dos escuadras se atrevió a descuidar su portería. Reflejo de la sociedad en donde la consigna es resguardar aquello que se supone es nuestro: la nacionalidad, la ciudadanía, la camiseta (obvio de un país). El fútbol sin duda es reflejo de las sociedades. En México siempre nos quedamos con el "ya merito". Lo de Brasil fue impresionante. Aquello que los medios y el gobierno trataron de ocultar, su elefante blanco producto de la corrupción, se desmoronó al ausentarse su "estrella" en el campo. También se desmoronó su presidenta y su sociedad. Qué les va a prometer ahora que se acercan las elecciones y no hay dinero, sólo deuda, ni mundial ni un equipo nacional? Alemania también sorprendió pero por lo voraz. No tuvo misericordia, no perdonó ningún error del oponente. Arrazó con el orgullo de un estadio lleno de brasileños que incrédulos veían como gol tras gol aumentaba el marcador. Si bien es cierto que en el juego no se perdona, también creo que los alemanes demostraron un espíritu sistemático, disciplinado, ordenado que me asusta. Espero que con este triunfo no se levanten los ánimos de por si exacerbados de la ultraderecha. La final es el domingo y le voy a Alemania, no soy latinoamericanista ni eurocentrica, simplemente me aburre el juego de los argentinos. Tampoco creo que América deba ser para los americanos porque ninguno de quienes defendemos América estamos representados por el fútbol y, en mi caso, ni me interesa. Sólo espero que sea un partido con demostración de oficio y no a balón parado.
Nos vemos dentro de cuatro años (aunque reniegue de ello).

18.6.14

teorías de la psique

derivado de mis múltiples procesos creativos y lúdicos acompañados de terapias alternativas y no tan alternativas, más bien psicoanalíticas, he descubierto dos teorías de la psique que me entusiasman por su complejidad.
Una la denominan la "teoría del martillo", aunque traducida a nuestra cultura sería la "teoría del NO". Esta teoría consiste en el diálogo interno en el que incurrimos cuando pensamos en que necesitamos pedirle algo a alguien pero no tenemos la certeza de que ese alguien nos podrá solucionar como nosotros estamos esperando nuestra petición. Ejemplo:

AAA: necesito clavar un clavo pero no tengo martillo.
AAA: si se lo pido al vecino que estaciona su carro enfrente de mi casa y he estado apunto de pincharle las llantas porque me molesta que cuando llego del súper no me puedo estacionar porque está él y tengo que caminar varios metros con las bolsas en mano...
AAA: entonces mejor no se lo pido porque seguramente como sabe que le tiro mala leche por ello seguramente me va a decir que NO.

Como se puede observar en este diálogo, que puede ser mucho más largo, lo que queda al descubierto es la inseguridad o la incapacidad de poder comunicar sin juzgar, producto de una historia cultural que ha trastocado la identidad.

La segunda teoría es la "teoría del claxón", ésta se define por el impulso que nos lleva a tocar o no la bocina del auto cuando estamos en una situación de estrés.
Ejemplo: El otro día que salía de nadar  e iba tarde al trabajo me percaté que es posible controlar ese impulso de tocar el claxón, un reflejo de la frustración de no poder avanzar a la velocidad que deseamos, y que en realidad oculta un impulso mucho más complejo e inconsciente de lo que no podemos evidenciar en tan solo un instante.
Este reflejo de frustración se traduce en muchas de nuestras acciones pero no por ello estamos conscientes de las mismas, lo que sucede en este caso es que la relación claxón-ambiente-otro es producto de un deber ser social. Sin embargo, es posible traducirlo en una experiencia positiva si de forma consciente nos percatamos que afectamos algo/alguien y que sin duda no avanzaremos más rápido si lo tocamos con frenesí.